lunes, 28 de marzo de 2016

Espectáculo visual

El pasado 23 de marzo fui al cine a ver Batman v. Superman: El amanecer de la Justicia, una película por cuyo estreno llevaba esperando desde hacía casi tres años. Al igual que me ocurrió con El hombre de acero, fui muy nervioso y con unas expectativas bastante altas que, sin embargo, se redujeron cuando, el día anterior, observé que el filme no había recibido, en general, muy buenas críticas. Mientras iba viendo la película, tenso como si estuviera en el bautizo de un gremlin, estuve todo el rato esperando a que ocurriera algo que me decepcionara, pero no fue así. Cuando acabó y, tras leer las críticas -no quise leerlas antes para que no influyeran en mi primer visionado-, lo primero que tengo que decir es que no entiendo que sean tan atroces. Puedo llegar a comprender que no haya gustado, claro, porque para gustos están los colores, pero no me termina de encajar el porqué de que algunos de estos "especialistas" o "expertos" que han puesto por las nubes otras cintas de superhéroes sitúen ahora esta a la altura del betún. Si esperaban encontrarse con una obra cinematográfica del tipo El Padrino o Ciudadano Kane, se equivocaron de sala, de película, de expectativas, de predisposición y de todo. Señoras y señores, es una película de Batman y Superman, ¿qué esperaban? 

No quiero decir con esto que se trate de una cinta simple, pero desde luego no se puede comparar tampoco con la complejidad de la trilogía de Christopher Nolan de El caballero oscuro, por traer a colación un ejemplo del mismo género. Esas tres obras corresponden a una visión diferente, a una manera aun más realista de hacer cine de superhéroes. Que también me chifla, por cierto, pero eso no quita que haya otras formas también válidas de enfocar estas historias basadas en cómics. Tanto es así que, aunque prefiero el estilo de DC, el tono -más desenfadado- que utiliza Marvel en sus películas me resulta también genial, y de hecho creo que es tremendamente positivo que cada compañía tenga su propio carácter en este sentido.

No son todos, por supuesto, los que la han pulverizado con su crítica, y lo cierto es que cada vez me encuentro con más y más análisis en Internet que valoran positivamente el filme. Personalmente, aunque no me pareció una película perfecta, me gustó mucho. Creo que es muy del estilo de Zack Snyder, que, por lo que he podido comprobar, o te encanta o lo detestas. En comparación con El hombre de acero, que también me gustó -como dejé claro en mi análisis en su momento- y que también fue parcialmente despedazada por la crítica -no tanto, eso sí-, creo que Batman v. Superman es superior en algunas cosas e inferior en otras. Eso es lo que quiero analizar aquí; no necesariamente comparándola con la cinta de la que es secuela, sino abordando cuáles han sido los aspectos que me han gustado y cuáles no tanto. A partir de aquí, esta entrada CONTIENE SPOILERS, así que lee bajo tu responsabilidad.


Lo primero que quiero resaltar es que Batman v. Superman es una cinta tremendamente oscura, incluso más de lo que esperaba. No digo que esto sea algo malo, en absoluto, pues considero que es un tono apropiado para el que es, en cierto modo, un filme de transición hacia La Liga de la Justicia

Con esto, vamos a empezar por el principio de la película, porque me gustaría destacarlo especialmente. El comienzo me pareció más que apropiado: cuenta, en un espacio de tiempo limitado y de manera sublime, el origen de Batman y enlaza y sitúa al personaje en el universo cinematográfico que DC inició en El hombre de acero, a la vez que nos introduce ya en las motivaciones que tiene Bruce Wayne para no fiarse de Superman. Ciertamente, el sentir de los personajes es algo que queda muy bien plasmado a lo largo de la trama.

Tras esto, se nos introduce por primera vez a Superman en esta película. He leído por ahí que Batman y Wonder Woman eclipsan al Hombre de Acero en la cinta, pero no estoy de acuerdo. Es cierto que se le dedica más metraje al Caballero Oscuro y que la amazona, cuando sale, está genial, pero para nada Superman queda desmerecido.

Por cierto, aunque para los ciudadanos de Metrópolis es una especie de Dios y esa es la imagen que tratan de vendernos todo el rato, creo que para el espectador el personaje no podría ser más cercano y más humano. Y eso me gusta: es un Superman que se decepciona, que ama, que se involucra... Quizás se muestra extremadamente pesimista en un momento dado e incluso a mí me llegó a parecer exagerado y fuera de lugar, pero al menos acaba redimiéndose y de qué manera: sacrificándose por Lois y por la humanidad. Estupendo Henry Cavill una vez más, por cierto, demostrando que nació para interpretar a Kal-El.

Y volvamos a Batman: Ben Affleck ha dejado callados a todos los que dudaban de él. Las comparaciones son odiosas, pero si a priori era el actor que físicamente más se parecía al Bruce Wayne de los cómics de todos los que lo han interpretado, a la hora de la verdad lo ha clavado. Me gusta mucho este Caballero Oscuro, y estoy deseando ver también su(s) película(s) individual(es).

El resto de personajes también me ha gustado en líneas generales. A destacar: Lois Lane, como hilo conductor de casi toda la parte de Superman y razón de ser de este, está genial, y también de manera independiente; Alfred me gustó aún más de lo que esperaba; y de Wonder Woman, aunque está algo metida con calzador, lo que podemos ver de ella me cautivó. Eso sí, el Lex Luthor de Jesse Eisenberg, no obstante, no acabó de convencerme: me resultó un Lex más excéntrico de lo normal que no me encajó del todo.


A nivel visual, la película es una maravilla, con algunas de las mejores escenas que he visto en cine de superhéroes, y la acción y las batallas están bastante bien rodadas, en especial la que enfrenta a los dos protagonistas: aunque me dolió en el alma ver a mi superhéroe preferido recibir una paliza -con kryptonita de por medio, no lo olvidemos-, la pelea es extraordinaria. El gran "pero" que le ha puesto mucha gente es el motivo por el que Batman no le asesta el golpe de gracia a Superman. Vale, es entendible que, de cara al espectador, quede un poco raro. Aun así, a mí personalmente me cuadra bastante y le veo el sentido. De hecho, es algo en lo que se hace hincapié desde el principio: no hemos vuelto a ver la muerte de los Wayne porque sí. A mi entender, Bruce no mata a Clark en ese momento porque para él el asesinato de sus padres es algo muy traumático y en ese momento se ve a él mismo como el asesino que quitó la vida a sus padres; por eso se detiene, porque se da cuenta de en qué se ha convertido, y es un antes y un después para el personaje, sin duda.

Por su parte, la batalla final contra Doomsday está bien, aunque no puedo quitarme de encima la sensación de que podría haber sido mejor. Eso sí, ver a la Trinidad (Superman, Batman y Wonder Woman) luchando codo con codo supone una auténtica gozada.


Al desarrollo de la trama, en general, no le puedo poner demasiadas pegas. De hecho, los 153 minutos que dura la cinta se me pasaron volando, lo cual es un claro indicativo de que disfruté del espectáculo, y me convenció lo que cuenta. Por cierto, volviendo a las comparaciones con El hombre de acero, me resultó gracioso a la par que adecuado que aclararan todo el rato que no se estaban produciendo bajas civiles como consecuencia de las distintas luchas que se desarrollaban, para no volver a caer en una de las cuestiones más criticadas de la otra cinta: el elevadísimo número de muertes que produjo el enfrentamiento entre Superman y los kriptonianos.

Tampoco es que estemos hablando de un guión redondo, pues hay algunos aspectos que no están del todo bien contados o no quedan totalmente claros, como el plan de Luthor con Doomsday, por ejemplo. Lo que sí está claro es que el punto fuerte de la cinta es el aspecto visual, muy del estilo de Zack Snyder.

Podría seguir analizando más y más aspectos de la película, pero no acabaríamos nunca, porque lo cierto es que Batman v. Superman comprende muchísimas subtramas. Y este es uno de los principales problemas que tiene: quiere contar tanto que carece de la profundidad que le habría venido bien para algunas cuestiones. Le falta tiempo para adentrarse algo más en determinados temas, algo que el espectador habría agradecido, como pueden ser las motivaciones de algunos personajes como Lex Luthor y Wonder Woman. Como suele decirse, el que mucho abarca, poco aprieta.

¿Por qué ha pasado esto? Yo creo que la explicación tiene un nombre propio bien claro: Marvel-Disney. El universo cinematográfico que ha creado la competencia y su evidente éxito hizo que Warner-DC se pusiera las pilas, pero las prisas les han traicionado, como se atisba en Batman v. Superman.

Disney fue poco a poco: películas individuales de Iron Man, Capitán América, Thor y Hulk, dejando caer pistas sobre su futura unión para luego, en Los Vengadores, juntarlos a todos sin que se antoje necesario contar el origen y las motivaciones de los personajes, porque ya se ha hecho en cintas anteriores. Warner ha querido hacerlo al revés para tratar de alcanzarlos lo antes posible, pero habría venido mejor que se hubieran llevado a cabo los filmes individuales para después hacer esta película y luego juntarlos a todos definitivamente en La Liga de la Justicia.

Ojo, tampoco me parece descabellado cómo lo están haciendo, pero sí que creo que haber intentado contar tantas cosas en un solo largometraje le ha jugado en contra. Eso no quita que lo que el filme cuenta no esté nada mal, e incluso tremendamente emocionante en algunos momentos.

En resumen, en líneas generales, la película me gustó bastante. ¿Los dos superhéroes que más me gustan, juntos en una película? Poco más podía pedir, y Batman v. Superman cumplió mis expectativas a grandes rasgos. De momento, la nota que le doy es de un 10 sobre 10.

Respecto a los cabos sueltos que deja la cinta, está por ver hasta qué punto se convierte en realidad la visión que tiene Bruce y la visita desde el futuro que le hace Flash, así como de qué manera regresa Superman de entre los muertos. Al respecto, y por esto creo que introdujeron la conversación con Jonathan Kent, creo que será, precisamente, su padre adoptivo, el que le "ayude" a volver a la vida. Solo espero que no les dé por hacerlo como en el cómic de La muerte de Superman, sino de una manera algo más "realista", y que el que retorne sea el Superman que ya conocemos. Lo comprobaremos el año que viene en La Liga de la Justicia.