miércoles, 22 de noviembre de 2017

Una entretenida película para unirlos a todos... sin más

El pasado 18 de noviembre pude ver por fin la esperada Liga de la Justicia, con la que el Universo Cinematográfico de DC (UCDC) ha tomado un nuevo sendero. Antes de continuar, quiero recordar que a quien escribe estas líneas le encantaron tanto El hombre de acero como Batman v. Superman, ambas (sobre todo esta última) bastante más oscuras y serias. Es por eso que el reenfoque no me ha encantado, si bien me ha parecido medianamente adecuado en general para una cinta que reúne a un grupo de superhéroes que deben inspirar y transmitir esperanza.

Sea como fuere, y a modo de resumen, he de decir que el filme me ha resultado entretenido y sirve para presentar (o hacer evolucionar, según el caso) a unos personajes que son el punto fuerte y de los que entran ganas de ver más. Se trata de una cinta sin muchas pretensiones y con una historia bastante simple, lo cual es claramente su punto débil, teniendo en cuenta que esta película se merecía mucho más.

Son muchos los aspectos que habría que analizar de Liga de la Justicia, así que vayamos por partes. A partir de aquí te recomiendo que no sigas leyendo si no la has visto, ya que el artículo contiene SPOILERS.


Para empezar, como ya he comentado, el guión se centra en ir bastante al grano, y no hay excesivo trasfondo ni profundidad en lo que cuenta. Es un grupo de superhéroes que se une para luchar contra un enemigo que amenaza al planeta; no mucho hay más. Son escenas que se suceden una tras otra sin ahondar demasiado. Al más puro estilo cómic, eso sí. Habrá a quien le guste más y a quien le guste menos, pero es lo que han hecho; en mi opinión, les ha salido una cinta pasable que, como también señalé, está completamente al servicio de los personajes principales. El principio del filme se dedica a ponernos en situación y a presentarlos de una manera medianamente efectiva. A lo largo de las dos horas que dura el largometraje, también los vemos desarrollarse.

Batman da un paso adelante respecto al cruel y hastiado justiciero que pudimos ver en Batman v. Superman y, motivado de alguna manera por el Hombre de Acero, es el encargado de reunir a la Liga. También se redime siendo el principal valedor de la operación para revivir al propio Superman, entre otras cosas por sentirse responsable de su muerte. No cabe duda de que vemos un buen Caballero Oscuro y que funciona de forma natural como coordinador del grupo.

Por su parte, Wonder Woman vuelve a estar maravillosa; Flash, que es el principal alivio cómico, cumple; Cyborg, el que a priori me parecía el menos atractivo, no me ha desagradado y resulta tener bastante importancia en la historia; y de Aquaman hay que reconocer que, con un aspecto algo alejado del que podemos ver en los cómics, no está nada mal, aunque se echa en falta saber algo más de su pasado y motivaciones (de eso se encargará su película individual, supongo).

Mención aparte merece Superman, de quien todos saben que es mi superhéroe preferido. El Hombre de Acero tiene muchísima "presencia" en Liga de la Justicia, incluso antes de que reviva, ya que se le nombra continuamente y, en cuanto ve la oportunidad, Bruce Wayne tiene claro que hay que hacer lo que sea necesario para traerlo de vuelta. Si en Batman v. Superman tenía la certeza de que había que eliminarlo como fuese, aquí está dispuesto a arriesgarlo todo para que vuelva a la vida. Un detalle que hizo que el personaje de Batman me gustara aun más.

Así pues, Clark, que en un momento dado regresa de la muerte confundido y se enfrenta al resto de la Liga en la que para mí es una de las mejores escenas de la película, vuelve convertido en un personaje con un tono bastante más ligero, posiblemente para intentar contentar a los que no gustaba la visión de Snyder de Kal-El. Una evolución del superhéroe hacia un sendero más luminoso, tras la versión que se nos mostró en Batman v. Superman, aunque se me ha antojado bastante forzada. En cualquier caso, a Superman, sobre todo gracias a Henry Cavill, tengo muchas ganas de volver a verle en una película individual y, por supuesto, en las (esperemos) futuras entregas de la Liga de la Justicia.


En cuanto al villano, Steppenwolf, al igual que el guión de la cinta, es bastante plano. Solo sirve
como "excusa" (amenaza, en este caso) para que la Liga se una. Además, su diseño a nivel estético y el hecho de que esté realizado íntegramente por CGI no ayudan.

Por cierto, hablando de los efectos especiales, si bien es cierto que no son de primer nivel, tampoco me han resultado tan desastrosos como los pintan por ahí. Eso sí, reconozco que el retoque digital para retirar el bigote de Henry Cavill en los reshoots que rodó Joss Whedon queda muy cutre, en especial en la primera escena de la película, en la que un niño habla con Superman mientras lo graba con su móvil.

En lo que al estilo del filme se refiere, a mi modo de ver, les ha salido un híbrido entre el tono serio que suele emplear DC-Warner y el más desenfadado que usa Marvel-Disney. Habrá quien piense que le ha venido bien que se lo hayan aligerado, en especial para captar al espectador medio y no solamente al fan de DC, pero me dio la sensación de que, por momentos, la balanza se inclinaba mucho más hacia el lado del enfoque que suele utilizar la competencia. ¿Que si me parece un error? A mí, personalmente, sí. ¿Que si creo que Liga de la Justicia tiene exceso de humor? Más que exceso, que tal vez también, creo que sobre todo no está del todo bien insertado en algunos momentos. Pero, insisto, la cinta es entretenida y se pasa volando; y creo que eso es lo mejor que se puede decir de esta película.

En definitiva, un largometraje en el que destacan los personajes por encima de todo y cuyos principales hándicaps residen en la excesiva sencillez del guión y del villano, un tono demasiado aligerado y, sobre todo, que se percibe que la cinta es un monstruo de Frankenstein, culpa de los reshoots que se llevaron a cabo para intentar, precisamente, aligerarle el tono. Es probable que cree una cierta división entre los fans de DC (que, eso sí, por fin hemos podido ver esta reunión en la gran pantalla), aunque también creo que captará a más espectadores "neutrales" (por así decirlo) que Batman v. Superman. A mí, personalmente, me ha parecido que no está del todo mal (mi nota, aún indecisa, está entre un 6 y un 7), pero lo que sí le pido a DC-Warner es que, en los largometrajes de este universo (ya sean películas individuales o secuelas de Liga de la Justicia), se lo curren un poco más.