domingo, 23 de marzo de 2014

Las paradojas temporales

Hace algo más de tres años publiqué una de las entradas que más me ha gustado escribir en este blog. En ella explicaba mi punto de vista sobre el destino y su existencia. Comentaba que creo en él siempre y cuando los viajes en el tiempo hacia el pasado no sean posibles, y de hecho expongo que considero que probablemente son imposibles, entre otras cosas, por las paradojas temporales que existen, y esto es lo que me gustaría tratar en este artículo.

Reconozco que el tema de los viajes en el tiempo es algo que me apasiona, y por eso me suelen llamar muchísimo la atención las películas que lo tratan. Precisamente el cine es un medio en el que se han plasmado estas paradojas en muchas ocasiones.

La más conocida es la llamada paradoja del abuelo, que plantea que una persona viaja hacia atrás en el tiempo y mata a su propio abuelo antes de que conozca a la abuela del viajero y puedan concebir. En ese caso, el viajero tampoco podría haber nacido, con lo cual no habría podido hacer el viaje y asesinar a su abuelo; es por eso que se crea esta especie de contrasentido. Para salvar el absurdo se habla de la existencia de universos paralelos, que en principio serían la respuesta si realmente se pudiera efectuar este viaje temporal. Según esta teoría, si el viajero del tiempo llega al pasado y mata a su abuelo, lo hará en un universo paralelo en el que nunca será concebido.

En cualquier caso, la de los universos paralelos no es la única explicación posible para este hipotético fenómeno de los viajes al pasado. Por ejemplo, una de estas soluciones está relacionada con la teoría de la relatividad de Albert Einstein: si un individuo viaja en el tiempo y evita su propio nacimiento, no tiene por qué desaparecer o desvanecerse, sino que seguiría existiendo, aunque quizás con alguna diferencia. Tal vez él mismo sea el único que tiene consciencia de su existencia y todos los demás jamás se habrían enterado de que existió. En esta página de Wikipedia están muy bien explicadas estas y otras soluciones.

Varios son los largometrajes en los que se plantean estos supuestos. En Regreso al futuro II (Robert
Zemeckis, 1989), Doc le explica a Marty en una parte de la cinta que, para arreglar cierto embrollo, deben viajar al pasado para evitar que se produzca, y no al futuro como propone Marty, pues el científico le explica que se han creado realidades diferentes. No relacionado con esto, en la primera parte de la saga, se ve que al viajar Marty al pasado y evitar que sus padres se conozcan, el joven empieza a desaparecer a menos que logre que se enamoren, lo cual no está evitando la citada paradoja.

Algo similar ocurre en Terminator (James Cameron, 1984), en la que el líder de la resistencia, John Connor, envía a un compañero al pasado a proteger a su madre, Sarah Connor. Sin embargo, el viajero acaba teniendo un hijo con su protegida: el propio líder que lo mandó. Si en el viaje no lo hubiera engendrado, ¿entonces cómo se habría motivado el propio viaje?

Sería entonces cuando vuelve a hacer acto de presencia el asunto del destino. Esto es algo que se ve aún más claramente en Harry Potter y el Prisionero de Azkaban (Alfonso Cuarón, 2004). En esta película -que, por cierto, a mi juicio, es la mejor de la saga- se plantea que incluso los viajes al pasado y lo que en ellos ocurra está predestinado; es decir, en cierto modo, no estaríamos libres del destino ni aun pudiéndose viajar al pasado. Se ve cuando Harry y Hermione viajan hacia atrás en el tiempo para tratar de evitar una muerte, pero todas las acciones que realizan y las decisiones que toman en realidad no cambian con respecto a las que se habían llevado a cabo antes de realizar el viaje; vamos, que hasta el propio viaje estaba predestinado.

La máquina del tiempo (Simon Wells, 2002) también propone que todos los sucesos que tienen lugar son inevitables. En el filme, el protagonista fabrica una máquina del tiempo para evitar que su prometida muera, pero por muchos viajes que realice e intente impedirlo, ella acaba muriendo en todos los casos. Esto impide que se cree la paradoja, pues la propia muerte de su novia es lo que motivó la creación del artilugio y el consiguiente viaje; si ella no fallece no se produciría, y por eso tiene que morir siempre.

En estos últimos casos lo que se ha hecho es eludir la paradoja, pues las acciones del viajero estarían ya incorporadas en la sucesión de acontecimientos que conducen del pasado al presente. Sin embargo, personalmente, pienso que si se pudiese viajar hacia atrás en el tiempo, dudo mucho que todo estuviera predestinado como sugieren. ¿Si una persona lograra viajar al pasado y se propusiera, por ejemplo, matar a su propio abuelo, acaso eso a lo que llamamos destino se lo impediría? No lo creo. Es por eso que creo en el destino en tanto en cuanto los viajes hacia atrás en el tiempo no sean posibles.

De un modo cómico también se desarrolla esta paradoja en un capítulo de Futurama, en el que Fry, en un viaje al pasado, trata de evitar que su abuelo muera, pero no lo consigue. Entonces él mismo se acuesta con su abuela y acaba convirtiéndose en su propio abuelo. ¿O siempre lo fue?


Otros geniales largometrajes que también versan sobre la temática de los viajes en el tiempo de forma espléndida son algunos como El efecto mariposa (Eric Bress y J. Mackye Gruger, 2004), Looper (Rian Johnson, 2002), Los cronocrímenes (Nacho Vigalondo, 2007), la emotiva Una cuestión de tiempo (Richard Curtis, 2013) o la compleja Primer (Shane Carruth, 2004). Filmes que, sin lugar a dudas, se merecen su propio análisis por separado. Con lo que me gusta el asunto y las películas en sí, seguro que acabaré haciéndoselo.

1 comentario:

  1. Tema bastante controvertido, mi opinión rápida, que me dejé toda la fuerza en el tema sobre el Barça.

    Si existen viajes temporales al pasado, existen sí o sí universos paralelos. Creo que es irremediable. No creo ni que desaparecieramos, ni que el destino fuera innegable a cualquier situación, ni nada por el estilo. Lo más, parcialmente lógico, es la creación de un nuevo universo al volver atrás en la línea temporal, puesto que el simple viaje crearía una nueva línea con una serie de cambios; no es posible que el tiempo se detuviera hasta que yo "volviera" en la primera línea temporal que yo he modificado al hacer el viaje temporal.

    Me explico, si yo viajo atrás 70 años en el tiempo en la línea temporal 1, todos los cambios que yo introduzca en esta línea 1 se verían reflejados no sólo en el momento en el que los produzco, sino también esos 70 años. Por poner un ejemplo, si viajo atrás en el tiempo y me adelanto a Einstein "creando" la teoría de la Relatividad, ¿significa entonces que a partir de ese momento se me conoce a mi como el autor de dicha teoría y que por lo tanto, si vuelvo a la actualidad en la Línea Temporal 1, se me conocería a mi como su autor? Pues yo creo que no, simplemente que al viajar en el tiempo hacia atrás he creado un línea temporal 2 que puedo modificar a mi antojo y en donde se verían reflejados todos estos cambios; pero sólo en esta línea temporal 2, puesto que la Línea Temporal 1 seguiría su curso sin verse afectada por el viaje que yo he realizado.

    En resumen, si una persona viaja atrás en el tiempo en mi opinión viaja a un línea temporal paralela a la que somete a cambios, siendo cada viaje un nuevo universo creado a partir de ese cambio. Por lo tanto sí, creo que es posible que existan estos viajes temporales y además, creo que ya han podido haberlos, por lo que es muy probable que ya existan universos/líneas temporales paralelas.

    Saludos!

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